Despedida a un padre...

Quiero que sepas que he decidido olvidarme de ti, que mi mente no recuerde más nada de ti pues tengo demasiadas ilusiones rotas como para seguir imaginando nuevas y solo recibir indiferencia y un silencio tortuoso.

 Pienso en ti todos los días... pero hace mucho que tú no estas para mi, siento haber sido una molestía en tu vida. Necesito pensar que al menos una parte de ti aun me quiere, pero tienes tu propia vida en la que yo no tengo lugar, y ahora simplemente soy un estorbo para ti, hasta un ciego puede verlo, pero yo no quería hacerlo.

 Las razones se han juntado para decidir que estas serán mis ultimas palabras, olvidare todo... tu dirección aunque sea la misma que tuve en mi infancia, tus consejos pues ahora de da igual que me ocurra, tus palabras diciendo que siempre estarías para mi las cuales solo han servido para seguir creando falsas esperanzas. Me he cansado!! Me he cansado de buscarte y encontrar solo un silencio frio y distante...
 Ya no quiero que mi mente imagine momentos que ya no existirán, porque eres distinto y cuando llegó la cruel realidad en el entierro de una de las personas más importantes de mi vida "mi bisabuelo" imagine nuestra reconciliación en ese momento de gran dolor pero no fue así, y me hizo sentir mal, peor aun, me sentí como una niña desamparada, desprotegida demasiado olvidada por su propio padre.

 Así que si te olvido ya no sufriré más, ni me creare falsas ilusiones a mi débil corazón, ni pensaré en ti como padre que es lo que quieres, pues fuiste capaz de decirme hace años que estabas jubilado como padre... Todo será mejor para ti y para mí, para mi por las razones que te he explicado y para ti por que ya no tendrás esa piedra en el zapato que tanto te molesta, tu única hija...


 Un millón de palabras no pudierón hacer que vuelvas lose por que lo he intentado, tampoco un millón de lagrimas lose porque he llorado hasta quedarme sin lagrimas...

 Por todo esto te digo adiós y deseo que te vaya bien en tu nueva vida como padre jubilado, aunque yo jamás me jubilaré como madre de mi hijo ni cuando mi corazón deje de latir...